Promueve la ONU el incremento de la participación de las mujeres en la ingeniería y matemáticas.
En México y el mundo, una de cada tres personas que se dedican a la ciencia son mujeres y el 70% de ellas están en el área de la salud. Es muy bajo el índice de mujeres que se desarrollan en la ingeniería, las matemáticas y la tecnología. Ante ello, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), proclamó el 11 de febrero como el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, con el fin de promover la participación de ellas, especialmente en estas áreas del conocimiento donde aún tienen una baja inclusión.
Mónica Suárez pertenece a esa ínfima cantidad de mujeres que se desarrollan profesionalmente en el área de las matemáticas. Ella es Licenciada en Seguridad e Higiene Industrial, cuenta con Maestría en Seguridad y Protección Ambiental, tres diplomados relacionados con capacitación, seguridad y medio ambiente, además de una certificación de la Norma 45001 de Seguridad y Salud Laboral por Bureau Veritas y nos comparte sobre su experiencia en esta área que, a través de los números y la estadística se dedica al análisis de riesgos y prevención de accidentes de trabajo.
Mónica es Supervisora de Seguridad y Salud Ocupacional en mina La Yaqui Grande de Minas de Oro Nacional, filial de Alamos Gold Inc., donde desarrolla un trabajo cuya especialidad no es muy popular pero que resulta muy importante en toda industria. Velar por la seguridad de cientos de personas todos los días, a través de la detección y prevención de los riesgos cotidianos que se pueden presentar.
Entre los estudios que realizan en su área destacan los análisis de ruido, de Iluminación, de temperaturas, de vibraciones, de ergonomía, entre otros. Todos ellos, con el objetivo de determinar si algún factor pone en riesgo la salud o seguridad de los trabajadores y, en consecuencia, actuar antes de que suceda. Para ello es necesario evaluar la exposición del trabajador a los distintos niveles de ruido, temperatura alta o baja, los niveles de iluminación más adecuados, con el fin de cuidar el bienestar e integridad de las personas y garantizar que el trabajo no comprometa la salud.
Mónica tiene 18 años de experiencia en seguridad industrial, ha laborado en la industria de la construcción, en manufactura textil y en la industria minera. Ha trabajado en nueve municipios de siete estados de la República Mexicana: Sonora, San Luis Potosí, Durango, Oaxaca, Coahuila, Nuevo León y Baja California.
Entre sus experiencias más enriquecedoras menciona un trabajo que desarrolló para la empresa M3 que brindaba servicios de ingenieria en construcción en una empresa en Cananea, donde tuvo la experiencia en prevención de riesgos y estadísticos de 5 mil trabajadores de 52 empresas contratistas que administraban.
Hace cuatro años, Minas de Oro Nacional, la contrató en el proyecto Cerro Pelón y posteriormente vivió toda la construcción de la Mina La Yaqui Grande, donde había que prevenir riesgos en 800 trabajadores.
Lo que más disfruta de su trabajo según dice, es el análisis estadístico, trabajar con números que se convierten en acciones de prevención, el contacto con las personas para llevar un mensaje y convencerles de respetar todos los protocolos de seguridad y ver los resultados de llegar a casa seguros, lo cual le genera mucha satisfacción, externó.
“El mensaje que puedo darle a las mujeres, es que todo éxito requiere de perseverancia, ¡claro que habrá siempre muchos obstáculos!, pero sí se puede lograr lo que deseamos ser por nuestros conocimientos y eficiencia, solo deseo transmitir que sí es posible tener éxito en lo que sea, en lo que cada quien anhele dedicarse, el género no es ningún impedimento para intentarlo y sobre todo lograrlo”.
Compartió que ella se ha adaptado a una vida nómada que disfruta. Con 12 años viajando por trabajo y estando fuera de su lugar de origen: Torreón, Coahuila. También se ha adaptado a laborar en un entorno eminentemente masculino. En su departamento es la única mujer. Situación que no le ha impedido crecer y desarrollarse con éxito, afirmó.
El 11 de febrero, Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, tiene el propósito de sensibilizar sobre la necesidad del apoyo a las mujeres científicas y promover el acceso de las mujeres y las niñas a la educación, la capacitación y la investigación en los ámbitos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas, en cuya tarea se ven comprometidas las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU Mujeres), la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) y otras organizaciones.
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