Actualmente existen todo tipo de esferas y objetos para decorar los árboles navideños. En México las esferas son un objeto decorativo tradicional. A nivel mundial las esferas mexicanas son reconocidas por su calidad. Para elaborarlas de forma artesanal se recurre a algunos minerales.
El plástico es un material cada vez más presente en todo tipo de objetos. Las esferas no son la excepción. Sin embargo, las que se fabrican de vidrio soplado siguen siendo las favoritas de muchas familias alrededor del mundo.
El vidrio se forma a partir de la arena. En ella hay un material llamado sílice. Este es una combinación de silicio con oxígeno. Este mismo material forma al cuarzo en todas sus variedades.
Además de la arena se requieren otros materiales. Para fabricar vidrio se necesita carbonato de sodio y caliza. Podríamos decir que el vidrio es una mezcla de arena de cuarzo, sosa y cal. Para hacer el vidrio se mezclan a temperaturas muy altas de entre 1,400 y 1,600 grados Celsius. Así se obtiene una pasta vítrea.
Fabricar objetos de vidrio no es nada nuevo. En Alemania comenzaron a fabricarse adornos de vidrio para los árboles navideños a mediados del siglo XVI. Los primeros adornos tenían formas muy diferentes a las esferas de hoy en día. Se crearon guirnaldas de cuentas de vidrio que se colgaban de los árboles. También se volvieron populares figuras como frutos y nueces.
Para el siglo XIX se agregó un detalle que ahora es muy común ver en las esferas. Justus von Liebig desarrolló la técnica de plateado en la década de 1850. Cuando el vidrio se enfriaba se agregaba una solución de nitrato de plata. Se cubría la superficie de la esfera con movimientos circulares. Cuando el nitrato se secaba se pintaba sobre esa capa. Finalmente se agregaba una tapa y un gancho a la esfera.
Ya con la forma de la esfera que conocemos es más fácil mencionar todos los materiales que la forman. La base es el vidrio, que se obtiene de la arena de cuarzo. En México los principales productores de este material son los estados de Veracruz, Coahuila y Nuevo León.
La base de la esfera navideña es el vidrio. Para fabricarlas se usan otros materiales para los decorados. Entre ellos están barnices, tintes, brillantina, pegamentos y alambres metálicos. En nuestro país aún se fabrican con métodos artesanales.
México tiene dos grandes comunidades productoras de esferas navideñas. Los pueblos mágicos de Tlalpujahua en Michoacán y Chignahuapan en Puebla son reconocidos a nivel mundial por la calidad de sus esferas. El primero de ellos produce en promedio 37 millones y el segundo 70 millones de esferas al año, al menos así fue en 2019. Más del 60% de su producción se exporta a países de toda América y Europa.
Las esferas navideñas son una tradición en muchos sentidos para los mexicanos. Gran parte de quienes vivimos aquí decoramos con ellas. Además, es un producto de exportación que resiste en el gusto de los consumidores internacionales ante la aparición de objetos similares de origen asiático. Al mismo tiempo, los materiales con que se fabrican provienen en gran parte de la minería nacional.
Comentarios