La seguridad dentro de las minas no depende sólo de lo que se haga al interior de la unidad, sino de hacer partícipes a los pobladores de las comunidades en las estrategias que funcionarán a favor del desarrollo de la región, consideró Raúl García Reimbert, Consultor Independiente en Administración de Riesgos.
Opinó que en el sector minero – metalúrgico se debe evolucionar en los métodos de seguridad y “la forma correcta de manejar la seguridad, es haciendo partícipe a la población de lo que ocurre adentro”.
En charla con Arzate Noticias, el asesor corporativo de riesgos indicó que la socialización con las poblaciones es la mejor manera que tiene una empresa para optimizar la seguridad interna y externa.
Destacó que lo más conveniente es identificar a los líderes de las poblaciones y permitir su desarrollo no sólo durante la existencia de la mina sino a posteriori, lo cual ayudaría a identificar los probables riesgos y a tener la solución para eliminarlos.
Otro punto importante que destacó García Reimbert es el trabajo que se realiza con los jóvenes, por lo que propuso fomentar el deporte, los talleres, despertar el interés en los negocios y que las minas se adapten a las necesidades de ellos.
Enfatizó que la pobreza no crea delincuencia, lo cierto es que las barreras sociales crean delincuencia, dijo, socializar y mezclarse depende del área de Recursos Humanos y esto beneficia a la buena contratación de personal.
“Recomiendo revisar las necesidades de seguridad en la empresa, antes de gastar, porque no todos los sistemas pueden aplicarse a cualquier lugar de la República”, propuso y agregó que el 1.5% de las ventas, es a veces el gasto mínimo de seguridad en una empresa.
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